Acabo de llegar de Cali otra vez ¡Qué maravilla! Esta vez tení­a que impartir una conferencia en la Universidad Autónoma de Occidente («Turismo y cultura, los viajeros del siglo XXI», muy bien Marí­a Victoria). Y he aprovechado (gracias Bania, gracias Aleja, gracias Mauricio). Me han permitido disfrutar de cosas tan diversas como observar aves espectaculares y meterme una noche de rumba. ¡Ay amigos! vayan a La Matraca, cómo bailan tangos, boleros y salsa. Grandes y pequeños, viejos y jóvenes, gordos y flacos, pero todos -mejor dicho todas- unos bellezones. La mirada también alimenta, pero la próxima asistiré a una escuela.