La Junta de Castilla y León convoca un viaje de familiarización por León y su área turística de influencia. Viajamos desde Madrid a Arévalo, León, Astorga, Molina Seca, Castrillo de los Polvazares, Valdevimbre, Ponferrada y Benavente. Resaturantes, museos, palacios, bodegas… comidas exquisitas, modernas y tradicionales, y vinos del Bierzo y de León muy inrteresantes. Participo en un workshoop en León y consigo mucha información útil para conformar nuevos paquetes turísticos.
En Arévalo comemos en el Restaurante Cinco Linajes, que también es una Posada Real. Revuelto de Morcilla con Piñones y Pasas; Cochinillo asado con ensalada de lechuga; Manzana, Café y Orujo. El vino que nos sirvieron era Tinto Valdelosfrailes 20111 de Bodegas Matarromera, de la D. O. Cigales, un Tempranillo con crianza en madera; con capa media alta, color rojo picota oscuro, ribete púrbura; con un poquito de verdor en narzis y frutas rojas; y tanimos carnosos en boca con fruta roja, cacao, y largo. A la noche llegamos León, a cenamos de pinchos en Cocinandos (una Estrella Michelín). Al día siguiente tenemos el Workshop en el Parador de León, comemos de pinchos otra vez, pero bien, y salimos hacia Valdevimbre, donde visitamos la Bodega Pardevalles, y hacemos una cata de uvas y vinos en el restaurante-cueva Los Poinos. Blanco Albarín un Rosado y un Tinto , los dos últimos de Prieto Picudo. Al día siguiente partimos para el Camino de Santiago, Hospital de Órbigo, Astorga, con visita al Palacio de Gaudí, y seguimos a Molina Seca para comer en el Restaurante El Palacio la especialidad de la casa, el Botillo de El Bierzo, con un vino de mencía del Bierzo. Comenzamos con un plato de embutidos locales (chorizo, cecina, jamón, queso); Ensalada templada, de codorniz en escabeche, con lechugas, pimiento rojo, mozarella y patata cocida; y pulpo con cachelos, pimentón y aceite de oliva. Sacan para acompañar un Blanco de Godello 2011 de la Bodega del Abad, de la D. O. Bierzo. Y llega el plato principal, el Botillo con berza, longaniza y patatas; por si nos quedamos de hambre nos sacan trucha escabechada con pimientos de padrón y patatas panaderas. Acabamos p’a el arrastre, menos mal que hay autobús hasta Ponferrada y paseo guiado por la ciudad (me duele hasta el alma). Y después hasta Benavente para cenar.
Nos llevan a El Ermitaño, de mi buen amigo Pedro Mario Pérez, y nos sacan una cena espectacular, la pena es que ya veníamos trabajados. A ver. Canutillos de Cecina rellenos de hígado de pato y diulce de mebrillo, muy delicado. Sopa de Boletus edulis con torreznos crujientes y Aceite de Oliva Virgen Extra de Cebollino, un plato que destaca por su aroma. Hojaldre de manzana con sardina ahumada, pimiento asado, queo de pata de mulo, caramelo de soja y germinados, complejo y muy agradable. Lechazo de cordero churro asado en horno de encina, nos proyecta un video sobre los corderos en el campo, el pastor, y la preparación. Ytyermina con un postre de Milhojas de Cremoso de avellanas y almendras al chocolate con leche. Los vinos que nos sacan son presentados y explicados por el sumiller, Marcelino Calvo. Enebral Verdejo 2012, de la D. O. Rueda; y Tinto Gran Colegiata de Lágrima 2010, un roble con 4 meses de barrica de Tinta de Toro, de Bodegas Fariña, de la D. O. Toro. Buen viaje, muy agardable.